En México más del 80 por ciento de los adultos mayores sufre algún grado de pobreza, es decir 8 de cada 10 ancianos padece desnutrición, falta de atención médica y vivienda digna. Asimismo, por lo menos el 12 por ciento se encuentra en condiciones de miseria, de acuerdo al Consejo Nacional de Evaluación de la Política y Desarrollo Social (Coneval).
Este estudio revela que al menos el 75 por ciento de los adultos mayores no cuentan con seguridad social y el 65 por ciento no tiene trabajo y sólo un millón 200 mil personas de entre 65 – 80 años cuenta con ingresos suficientes para vivir sin carencias.
Por su parte, el estudio realizado por el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, detalla que en promedio 26 de cada 100 adultos mayores sufren algún grado de maltrato que va desde golpes, bofetadas, puñetazo, patadas y empujones, además ataques psicológicos como regaños, insultos, intimidación, abandono y robo de bienes económicos.
El agresor en la mayoría de los casos son familiares, en 43. 8 por ciento son mujeres, el 56.2 son hombres, el 17.4 por ciento algún enfermeras o sirvientas, y el 15.2 por ciento las instituciones, según lo reveló la encuesta del Colegio de México y la UNAM.
Asimismo el abuso se incrementa si el anciano padece algún problema de salud como demencia senil, Alzheimer, parálisis entre otras patologías de tipo crónico degenerativo.
Según el censo del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, hay 4.6 millones de adultos mayores en México.
Entre los estados con mayor población adulta se encuentra Puebla, Estado de México, Aguascalientes, Yucatán, la Cd de México.
El abandono en instituciones de salud
Pasaron 3 meses después de que fue internado y lo dieron de alta, pero nadie, ni familiar, ni amigo, ni conocido fue por él. Se quedó ahí en espera de que las enfermeras y el personal médico solucionarán sus necesidades básicas o que el final llegará pronto.
Ricardo Pérez es un octogenario que ingresó a finales de noviembre, al servicio de Medicina Interna del Hospital General de Zona 36 del Instituto Mexicano del Seguro Social, por un cuadro de neumonía.
Los médicos del servicio, así como el personal de trabajo social desconocían quien lo llevó al hospital, sólo se sabía que era derechohabiente, que tenía una pensión la cual hacía muchos años no cobraba y hacía tiempo vivía solo, según lo relató al médico de guardia, Joel Parada.
El doctor Parada comentó que el paciente ingresó con datos de abandono, en pésimas condiciones de higiene, con datos francos de desnutrición, así como dificultad para respirar condicionado por la temporada invernal y por encontrarse en situación de calle.
Recordó que en reiteradas ocasiones se trató de localizar a los familiares del anciano, pero jamás hubo respuesta de ellos, así mismo el personal de trabajo social se contactó con las autoridades estatales y municipales del Sistema de Desarrollo Integral para la Familia (DIF) para que el señor Pérez pudiera ingresar a aún asilo o albergue público y recibiera los cuidados necesarios, pero no hubo respuesta.
En este sentido, la trabajadora social de este hospital, Marina López, comentó que son varios los casos que se presentan en dónde los familiares llevan a los ancianos y no regresan por ellos, aunque reconoció que no puede precisar la cifra, aunque estimó que serán entre 5 y 10 casos por mes.
“No hace mucho tuvimos un paciente de unos 70 años, quien le daba a su hijo 50 pesos para que este lo pudiera visitar, el joven argumentaba que no tenía dinero para la gasolina y el venir a visitarlo le generaba ese gasto” recordó.
Explicó que cuando los familiares no se quieren hacer cargo de sus “abuelitos” se buscan instancias u organizaciones que puedan sufragar sus gastos
Los abuelos en la familia mexicana
Al respecto, la psicóloga Dulce María Pérez, indicó, en el país los casos de abuelos abandonados su índice no es muy alto, esto es debido a que en país la constitución de la familia sigue siendo unida.
Estimó que del total de la población senil más del 80 por ciento convive de manera cercana con sus hijos y nietos, asimismo 20 de cada 100 ancianos son llevado por convencimiento a una casa de retiro, mientras que 4 es internado sin autorización.
Comentó que este fenómeno ocasiona en los adultos mayores sentimientos de soledad, por lo que es muy difícil que se recupere, esto al saber que les queda poco tiempo, al contrario de un niño que es abandonado y cuenta tiempo necesario para recuperarse.
Asimismo, aunado a la soledad la depresión, ansiedad, desgate físico y emocional convergen y les impide obstante encontrar la paz en la muerte, esto por la falta de vínculos, de ahorro económico y relaciones interpersonales, tienen círculos que les cuesta trabajo cerrar.
La especialista consideró en los próximos años el problema del abandono se presentara mas grave, ya que un numero de adultos jóvenes se sumara a las filas de la tercera edad.
Al respecto, el Consejo Nacional de Población (CONAPO), señaló que para este año se espera que haya 6.4 millones de personas de la tercera edad, es decir alrededor de 2 millones más con respecto a este año.
